Hacienda quiere estar al tanto de determinados movimientos en tu cuenta bancaria. De no ser así, podrías tener problemas. Existen varias restricciones con el uso del dinero en efectivo y algunas alertas que saltan con las transferencias. Cabe destacar que la Agencia Tributaria solicita a los bancos informes sobre el estado de las cuentas de sus clientes anualmente. Quieren saber cuánto saldo tienen y cuáles son los volúmenes de salida y entrada global de dinero.
Además, para determinadas operaciones, el banco o la persona particular debe enviar declaraciones específicas a Hacienda cuando sobrepasa determinados importes. El órgano fiscal lleva adelante este control para interceptar posibles casos de fraude financiero y ajustar mejor la declaración de la renta a sus contribuyentes.
La información que le llega al fisco sobre cada contribuyente es la suma agregada de ingresos y salidas de dinero a lo largo del año, pero no comunica cada una de las retiradas, pagos o cobros realizados durante ese periodo. Esos son los datos generales. No obstante, si la Agencia Tributaria tiene interés en investigar un caso puntual, puede solicitar información adicional.
No hagas esto con tu cuenta bancaria o Hacienda te investigará
Además de notificar acerca del saldo y de la entrada y salida de dinero, las entidades bancarias tienen que enviar información al organismo sobre las cuentas bancarias de sus clientes ante determinadas operaciones.
Anualmente, Hacienda recibe información sobre los siguientes movimientos:
- Ingresos y retiradas de dinero en efectivo en la cuenta y cobros en general (pagarés, cheques, letras de cambio) realizados cuando el importe supera los 3.000 euros.
- Préstamos y créditos con un saldo a 31 de diciembre superior a 6.000 euros y operaciones financieras vinculadas a inmuebles (como hipotecas).
- Operaciones con algunos cheques, como los extendidos por diversas personas por importes superiores a 3.0005,06 euros cuando se abone en efectivo.
De hecho, si Hacienda lo cree conveniente, puede solicitar información sobre todas las operaciones la cuenta bancaria de un cliente, sin importar la cantidad.
Operaciones que debes notificar directamente a Hacienda
La ley de prevención de blanqueo de capitales obliga a los contribuyentes a presentar una declaración previa cuando deseen mover determinadas cantidades de dinero en efectivo, cheques u operaciones similares, en tarjetas prepago, oro y metales preciosos:
- Salida o entrada en España con un importe igual o superior a 10.000 euros o el equivalente en otra manera.
- En cuanto a movimientos dentro de España, deben presentarse declaraciones cuando el importe sea igual o supere los 10.000 euros o su contravalor en otra moneda.
Las transferencias bancarias no deben ser notificadas previamente, ni tampoco es necesario rellenar una declaración específica por ella en otro tipo de movimientos.
¿Cuánto puedo pagar por transferencia bancaria?
En líneas generales, no existen limitaciones sobre la cantidad de dinero que puede enviarse a través de una transferencia bancaria, pero sí en operaciones en efectivo. Esto no quita que determinados importes llamen más la atención que otros y deban estar debidamente justificados.
La ley prohíbe hacer transacciones en efectivo que sobrepasen los 1.000 euros. El Banco de España advierte que la limitación se aplica a la operación, pero no al pago en efectivo en sí. La sanción por incumplir el límite de pago en efectivo por 1.000 euros es del 25% sobre la cantidad pagada en efectivo. En estos casos, el Banco de España considera que tanto pagador como receptor son infractores.
Sin embargo, hay algunas excepciones. Por ejemplo, si el pagador es una persona que reside fiscalmente fuera del país y el pago no es por una actividad profesional, el límite sube a 10.000 euros. Por otra parte, las operaciones de cambio de divisas y pagos e ingresos realizados a bancos pueden realizarse en efectivo sin importe máximo.
En definitiva, Hacienda debe estar al tanto de lo que sucede en tu cuenta bancaria, y en tu economía en general, de la forma más clara posible para evitar posibles sanciones.