Los impuestos son imprescindibles para la economía de cualquier país, ese dinero que se recauda de las «manos» de los ciudadanos para destinarlo a diferentes sistemas, como puede ser en el caso de España la Educación o la Seguridad Social, entre muchos otros. Te contamos cuál es el impuesto que Hacienda va a subir, uno que nunca querrías tener que pagar y que te puede salir muy caro en el caso de que tengas que hacerlo.
¿Cuántos impuestos se pagan en España?
Los españoles pagamos entre un 24 y un 36% de nuestra renta bruta en impuestos, un porcentaje que depende de los ingresos y del tipo de hogar pero que se traduce en una cifra en torno a los 6.600 y los 27.200 euros al año, según datos oficiales de un informe publicado por el Consejo General de Economistas. Con estos datos queda claro que destinamos aproximadamente un tercio de nuestra renta a pagar impuestos, sean del tipo que sean en cada caso.
En el caso específico del IRPF, uno de los impuestos que más pagamos y que más soporta la población, el mencionado estudio detalla el porcentaje que suele corresponder según la renta de cada persona: rentas medias-bajas 10,38%, rentas medias-altas 20,5% y rentas muy elevadas entre el 33 y el 37%.
Hacienda subirá el impuesto de Sucesiones
María Jesús Montero, ministra de Hacienda, volvió a hacer referencia al Impuesto de Sucesiones en una nueva comparecencia, en este caso al ser preguntada por la armonización fiscal, que es una herramienta que defienden quienes quieren obligar a los países o regiones que menos gravan a sus contribuyentes a que suban sus impuestos para acercarse a una fiscalidad más alta como sí hay en otras zonas. Montero asegura que con este impuesto se ha producido un vaciamiento legal debido a que en muchas comunidades se ha bonificado en torno al 100%.
«A nivel de España, donde se producían las máximas diferencias que llegaban al vaciamiento fiscal de la figura de algunas CCAA era en el Impuesto de Patrimonio y, en segundo lugar, en el Impuesto de Sucesiones y Donaciones, pero básicamente en el Impuesto de Patrimonio donde el efecto capitalidad de Madrid ejercía un elemento de espiral con el resto de CCAA que estaba provocando una caída de ingresos imprescindible para fortalecer el Estado del Bienestar» aseguró la ministra en este sentido en la rueda de prensa posterior al Consejo de Ministros.
Es por ese motivo que el Gobierno aprobó el año pasado el llamado Impuesto temporal de Solidaridad a las Grandes Fortunas con la intención de gravar a los patrimonios netos superiores a 3 millones de euros que se estaban librando de pagar el Impuesto de Patrimonio en muchas regiones. Gracias a la puesta en marcha de esta iniciativa se recaudó en el pasado ejercicio una cifra de 623 millones de euros, un golpe fiscal a los grandes patrimonios que ha servido para que el Gobierno recupere su interés de recaudar en las herencias.
Ese interés es un viejo deseo de la ministra Montero, que llevaba tiempo queriendo subir el Impuesto de Sucesiones en las regiones en las que lo tienen más bajo, un deseo que tenía ya incluso cuando era consejera de Hacienda en Andalucía, y ahora confiesa que no se va a conformar con la armonización de Patrimonio y que luchará por subir ese impuesto: «Es obvio que la intención del Gobierno de España, al igual que al nivel internacional, es seguir trabajando en la armonización, sobre todo, de aquellas figuras que pueden ser un elemento a tener en cuenta en la inversión para que no se produzcan situaciones como, que aquellos que tienen mayor nivel de renta, atraigan más inversión por bajadas fiscales que aquellos que, teniendo que ejercer sus prerrogativas fiscales no las pueden hacer porque tienen que sostener el Estado del Bienestar teniendo desventaja respecto a las inversiones que van en este territorio», señala Montero.
Habrá que ver finalmente en qué queda la subida del Impuesto de Sucesiones y si los gobiernos autonómicos siguen evitando casi al 100% que los ciudadanos tengan que abonar este impuesto.