El carné de conducir es uno de los trámites más importantes que una persona realiza a lo largo de su vida, ya que aunque haya muchas que no se lo saquen, lo cierto es que siempre viene bien tenerlo, tanto por motivos personales como laborales. La Unión Europea se está enfrentando a la DGT a causa del carné de conducir por la decisión inminente de quitarlo a partir de esta edad, y si sigues leyendo te contamos los detalles… ¡toma nota!.
¿Qué hace la DGT?
La Dirección General de Tráfico (DGT) es un organismo perteneciente al Ministerio del Interior, el cual se encarga de la ejecución de la política vial y tiene como misión principal mejorar la seguridad y reducir los accidentes de tráfico en las carreteras españolas, sean del tipo que sean.
Entre sus funciones están regular de forma efectiva y eficaz la normativa relativa a tráfico y seguridad vial, conductores y vehículos, poniendo a disposición de los propios conductores cursos de conducción y todo lo necesario para que la conducción sea lo más segura y eficiente posible.
Cambios en el carné de conducir a petición de la UE
La UE y la DGT están actualmente en plena disputa o controversia por un cambio que Europa quiere hacer, concretamente cambiar la forma en la que los conductores españoles tienen que renovar su carné de conducir. La propuesta de la Unión Europea es de extender la validez del carné de conducir a 15 años en el caso de turismos y motocicletas, y a 5 años en el caso de camiones y autobuses, cambios que están generando un intenso debate con la DGT pero que al final tendrá que cumplirse.
La UE sostiene que esta medida no sólo armonizaría las normativas entre los países miembros, sino que también mejoraría notablemente la seguridad vial. Según esgrime en sus argumentos, los controles médicos obligatorios tras la expedición y renovación del carné de conducir garantizarían que los conductores mantuvieran las aptitudes necesarias para una conducción segura.
La DGT no está de acuerdo con estos cambios y sigue en postura de renovar el carné de conducir cada 10 años, una decisión que cuenta con el respaldo de algunos eurodiputados que muestran su preocupación por el impacto que la extensión de los plazos podría tener en los conductores mayores. Según argumentan, un periodo más largo entre renovaciones podría ser realmente perjudicial para los mayores, que ya de por sí necesita un seguimiento más frecuente de sus capacidades psicofísicas para determinar si están en condiciones de ponerse al volante con seguridad.
La polémica no se centra únicamente en la seguridad vial, también lo hace en la comodidad y los costos para los conductores, y mientras la UE asegura que su propuesta es una forma de unificar y simplificar el proceso, la DGT defiende que su enfoque es mucho más riguroso y adaptado a las necesidades específicas que tienen los conductores españoles.
Habrá que ver si la DGT consigue mantenerse en su postura y no se ve finalmente obligada a pasar por el aro de la Unión Europea con estos cambios en el carné de conducir. Y en medio del debate, los conductores españoles, que deben estar pendientes de si los cambios llegan o no, ya que sin duda serán significativos y afectarán a cualquier persona con permiso de conducir en nuestro país. Lo que está claro es que el debate parece que va para largo y que la decisión final se deberá tomar a conciencia y, sea cual sea, tendrá un impacto directo en la vida de millones de conductores que circulan en España cada día.