La movilidad urbana está experimentando cambios significativos, y los patinetes eléctricos se han convertido en una opción popular. Sin embargo, la Dirección General de Tráfico (DGT) en España ha anunciado medidas que restringirán su uso a partir de 2027. Vamos a explorar en detalle estas decisiones para seguir haciéndonos eco de todo lo que te puede afectar (si tienes coche eléctrico, atención a lo que está pasando con los puntos de carga).
¿Qué está pasando en España con los patinetes eléctricos?
En los últimos años, los patinetes eléctricos han ganado terreno en ciudades como Madrid, Sevilla y Málaga, incentivados por las autoridades locales. La DGT ha establecido regulaciones, limitando su circulación en ciertas áreas y fijando velocidades entre 6 y 25 kilómetros por hora. Además, se está considerando la obligatoriedad de un seguro. Sin embargo, la regulación específica de esta movilidad sigue siendo competencia de los ayuntamientos.
En Madrid, se ha implementado una reducción del 40 % en el número máximo de patinetes, pasando de 10000 a 6000. Estas medidas buscan gestionar el crecimiento descontrolado de este medio de transporte en la ciudad. ¿Vives en la capital de España? De ser así, pronto comenzarás a notar las restricciones de las que te estamos hablando con tus propios ojos.
Estos patinetes eléctricos dejarán de circular en España: atención en 2024
La DGT ha dado un paso más al anunciar que, a partir del 22 de enero de 2024, todos los Vehículos de Movilidad Personal (VMP) comercializados deberán contar con un certificado para su uso. Aquellos adquiridos antes de esta fecha podrán circular sin certificado hasta el 22 de enero de 2027.
A pesar de que los patinetes eléctricos se han integrado en nuestras ciudades como una opción de movilidad eficiente, su uso sigue generando controversia. Las autoridades buscan equilibrar la comodidad de este vehículo con la seguridad peatonal y la convivencia en el espacio público.
Está claro que las autoridades de Tráfico pretenden avanzar en la homologación de estos dispositivos después de los problemas que se han ido percibiendo. ¿Sabes de cuáles te estamos hablando? Entre ellos, de modelos que están circulando y no tienen dos sistemas de frenos independientes, como es obligatorio, o de conductores que abusan de la velocidad máxima y acaban sobrepasándola.
La convivencia de quienes usan estos VMP con los peatones está siendo complicada, pero tampoco resulta muy fácil con los ciclistas. En este sentido, te interesará saber que hay cierta polémica por las vías compartidas, así que quedamos pendientes a cómo pueda evolucionar esta situación (no anticipamos nada del otro mundo, si acaso algún ajuste normativo).
¿Qué marcas están homologadas y podrán seguir circulando según la DGT?
La DGT ha especificado que solo los laboratorios IDIADA Automotive Technology y TÜV Rheinland Italia están autorizados para expedir certificaciones de VMP. En su página web, se encuentran las marcas homologadas, entre las que se incluyen Cecotec, Segway, TIER, LIME, BIRD, y otras reconocidas. Por cierto, que si tienes coche, esta gasolinera te va a solucionar el problema de los precios.
Las medidas de la DGT reflejan la necesidad de una regulación más estricta en el uso de patinetes eléctricos, que han experimentado un rápido aumento en popularidad. A medida que estos vehículos se convierten en parte integral de nuestras ciudades, encontrar el equilibrio entre la comodidad del usuario y la seguridad vial se vuelve crucial.
La integración exitosa de los patinetes eléctricos en la movilidad urbana requiere una colaboración estrecha entre las autoridades y los usuarios. Las normativas claras y la educación sobre el uso responsable son elementos clave para lograr una convivencia armoniosa entre peatones, ciclistas, conductores y usuarios de VMP.
Las recientes decisiones de la DGT plantean un escenario de cambios significativos en el uso de patinetes eléctricos en España. A partir de 2027, la certificación será obligatoria, marcando un hito en la regulación de esta modalidad de transporte. Esperamos que sea un cambio algo más progresivo, no como este que te va a coger de imprevisto y te va a evitar quebraderos de cabeza.