La inflación, aunque más rebajada, sigue cebándose con los productos de primera necesidad, entre ellos, los de alimentación. Habrás notado un incremento en el precio del aceite de oliva como todos, pero ¿y si mañana dejara de estar disponible en los supermercados? Esto es lo que dicen los expertos y que, igual que esta otra previsión para el próximo año, esperamos que no suceda.
¿Por qué se ha encarecido tanto el aceite de oliva?
El valor del aceite de oliva virgen extra ha experimentado un drástico aumento en tan solo un año, pasando de 3,57 euros/kg a 7,10 euros/kg, según Newtral. Esta tendencia alcista ha afectado también a otros tipos de aceites, aunque de forma más moderada que con este. Lógicamente, te estarás pensando en cómo puede suceder esto en un país exportador, pero es algo más común de lo que crees.
La escasez de lluvias ha sido determinante en la subida de precios de varios alimentos, incluido el aceite. Por otro lado, las tensiones geopolíticas en Europa, que precedieron a la reciente invasión de Putin en Ucrania, provocaron un incremento en el precio de los fertilizantes, agravando aún más la situación.
El sector oleicola se encuentra actualmente en una situación complicada. Los precios nunca habían alcanzado niveles tan elevados, lo que genera pocas expectativas optimistas para el futuro cercano.
El desabastecimiento, más que probable en unos meses
Se prevé que la producción de aceite de oliva de la campaña de 2023 alcance alrededor de 680 000 toneladas, marcando una reducción del 45,5 % en comparación con la temporada anterior, en la que se cosecharon 1 492 000 toneladas de aceitunas.
Los expertos señalan que con este nivel, es probable que las demandas del mercado se satisfagan durante los primeros meses de la campaña 2023-2024. No obstante, es importante tener en cuenta que este cálculo no comienza desde el 1 de enero de 2024, ya que la campaña comenzó el 1 de octubre.
Por lo tanto, estas existencias únicamente podrán mantenerse durante los primeros meses, lo que sugiere que la situación podría complicarse a lo largo de 2024. Esto no implica necesariamente que no habrá aceite de oliva en marzo, pero es probable que la preocupación comience a surgir antes del verano. Mientras tanto, puedes aprovechar los descuentos de este supermercado.
¿Qué dice el Gobierno sobre esta situación?
Tanto el Gobierno como las patronales han difundido un comunicado para calmar la preocupación de los consumidores respecto a las recientes subidas de precios del aceite de oliva y las previsiones de que estas continúen en los próximos meses.
En el comunicado, se menciona que se espera que el precio se estabilice en un futuro cercano, aunque la certeza sobre esta afirmación aún está en duda. Esta industria es conocida por su capacidad de adaptación y resiliencia frente a diferentes desafíos, lo que genera cierta confianza en su capacidad para enfrentar las adversidades actuales.
Sin embargo, la experiencia previa ha demostrado que las proyecciones gubernamentales no siempre se materializan en la realidad, lo que hace necesario observar cuidadosamente la evolución de los precios mes a mes. De esta manera, será posible obtener una imagen más precisa de la situación y sus posibles efectos a largo plazo en el mercado del aceite de oliva.
La preocupación por el aceite de oliva es más que razonable. Después de todo, España es un país productor y no debería estar pasando esta circunstancia. Sin embargo, este sector nos ha dado una sorpresa de la que el calentamiento global tiene mucho que ver (no como el de los coches eléctricos, que nos impactaron sin explicación alguna con esta noticia). El próximo año veremos cuál es la situación.