Las manifestaciones de agricultores están lejos de terminar, y cada vez son más duras —aunque no siempre salgan en el telediario, todo sea dicho—. Una de sus consecuencias podría ser el desabastecimiento en supermercados, sobre el que el Gobierno ha tenido que pronunciarse. Lo que han afirmado es bastante inquietante, pero no más que esta previsión sobre el regreso de los recortes a España.
El caos que comenzó en Francia y se extendió a España: lo que está pasando
Los agricultores españoles han salido a las calles en los últimos días para protestar por la difícil situación que atraviesa el campo. Los altos costes de producción y los bajos precios que reciben por sus productos han llevado al límite a muchos profesionales del sector primario.
Las movilizaciones comenzaron a principios de febrero cuando miles de tractores colapsaron carreteras y ciudades en distintos puntos del país. Los agricultores y ganaderos pidieron precios justos que les permitan cubrir los costes de producción.
Según denuncian las organizaciones convocantes, los agricultores están vendiendo por debajo de lo que les cuesta producir. De hecho, en varias ciudades han tirado miles de kilos de alimentos a la basura, mientras que en otras —como Las Palmas de Gran Canaria—han regalado tomates y plátanos.
El detonante de las protestas fue la subida de los costes de producción, especialmente los relacionados con la energía, los fertilizantes y los piensos para el ganado. Esta situación se ve agravada por los bajos precios en origen de muchos productos agrícolas.
Los supermercados, en alerta: esto es lo que podría pasar estas semanas
En los establecimientos de alimentación se ha empezado a notar la falta de suministro de frutas y verduras frescas. Las imágenes en redes sociales muestran estantes vacíos donde deberían estar los tomates, lechugas, pepinos y otros productos del campo. Sin embargo, nadie habla de desabastecimiento en supermercados.
Las cadenas, en su mayoría, han confirmado que no han recibido las cantidades habituales de estos alimentos. En algunos casos, solo han llegado la mitad o un tercio de lo normal. Esto se debe a los bloqueos en centros logísticos y puertos claves por parte de los agricultores en protesta.
Lo cierto es que nadie se ha planteado racionarlos, como sucedió con las patatas en Canarias por la crisis con Reino Unido. De momento, tampoco han subido los precios debido a la escasez. Hay preocupación de que si las protestas continúan, podría haber desabastecimiento en supermercados de más productos.
La inquietante reacción del Gobierno: no se moja, pero sí advierte
El Gobierno ha tratado de lanzar un mensaje de tranquilidad respecto al desabastecimiento en los supermercados, aunque advirtiendo que la situación podría cambiar. Estas fueron las palabras que nos causaron inquietud, de hecho.
Por el momento, fuentes del Ejecutivo señalan que no tienen constancia de problemas graves de suministro en las cadenas de distribución. Sin embargo, no descartan que la situación pueda evolucionar si las protestas de los agricultores se prolongan en el tiempo.
«Nos trasladan que no se apunta a eso, a desabastecimiento, pero insisto, las cosas pueden cambiar y por tanto estaremos muy vigilantes», declaraba la portavoz del Gobierno, Pilar Alegría. El ministro de Agricultura, Luis Planas, también quiso lanzar un mensaje de «tranquilidad», aunque pidió el cese de las protestas.
Una vez más, tenemos que hablar sobre el desabastecimiento en supermercados, que esperamos no ver materializado en ningún punto de nuestro país. Las previsiones no son negativas en sí, aunque el hecho de que el Gobierno no lo descarte nos provoca algo de temor. De todos modos, siempre hay noticias positivas con las que continuar el día, como estos sectores en los que van a adelantar la edad de jubilación.