Un nuevo gigante de las telecomunicaciones opera en España y amenaza con dominar total y absolutamente el mercado en los próximos años. Te contamos cuál es la nueva compañía de telecomunicación que ya es la más grande de España y que se ha llevado por delante a Movistar y a todas las demás… ¡han perdido la batalla!.
La guerra de la telecomunicación en España
Son muchas las compañías especializadas en telecomunicaciones que han «peleado» a lo largo de los años por hacerse con la clientela en nuestro país, aunque siempre hubo la sensación (y los datos) de que iba a ser muy difícil destronar a Movistar de lo que comenzó siendo un monopolio pero que luego fue un liderazgo por encima de todas las demás empresas del medio que iban surgiendo.
Actualmente son muchas las opciones que una persona tiene a la hora de elegir una compañía para tener su teléfono móvil o sus servicios de Internet o televisión, entre muchos otros servicios que prestan.
Masorange se come a Movistar… y a todas las demás
Casi dos años después de que se comenzara a fraguar el acuerdo, por fin está todo arreglado y la fusión se ha llevado a cabo: Orange y MásMóvil se han convertido en una única empresa llamada Masorange, automáticamente la nueva líder en el mercado español en lo que a número de clientes se refiere, superando a Movistar. Además, Masorange se convierte también en una de las mayores 20 compañías nacionales por ingresos.
Las cifras de esta nueva compañía asustan, ya que nace con más de 30 millones de líneas móviles, más de 7,3 millones de usuario y 2,3 millones de usuarios de su plataforma televisiva. La cuota de mercado de esta nueva compañía supera el 40% tanto en fijo como en móvil, datos que son una auténtica barbaridad para ser nueva, aunque se trate de una fusión. Por si eso fuera poco, su cobertura fibra es la mayor de España según detallan sus responsables, con 20 millones de hogares comercializables con fibra óptica, además de contar con una cobertura móvil 4G del 98% y una 5G de más del 80% en más de 2.500 municipios de todo el país.
No contentos con destronar a Movistar y amenazar seriamente el futuro de cualquier compañía de telecomunicaciones en España, la nueva Masorange ha anunciado en su primer comunicado la firme intención de invertir unos 4.000 millones de euros en los próximos 3 años para incrementar su cobertura 5G por encima del 90% y cubrir con fibra óptica hasta 6 millones de hogares más, entre muchas otras mejoras de sus servicios.
Un gigante económico y de marcas
Este nuevo gigante de las telecomunicaciones, y de la economía, llega tras un largo proceso de análisis y aprobación por parte de los organismos reguladores, dando como resultado una nueva compañía que entra directamente al top de las 20 más importantes de España por ingresos con más de 7.400 millones de euros. Además, Masorange tiene un resultado operativo de 2.600 millones de euros y una valoración de empresa combinada superior a los 18.600 millones de euros.
La matriz de esta nueva compañía es Masorange, que seguirá contando con todas las marcas que en uno u otro lado han sido un éxito en los últimos años. Así, serán 10 las marcas a nivel nacional (Orange, Yoigo, Jazztel, MásMóvil, Simyo, Pepephone, Virgin Telco, Lebara, Lyca y Llamaya), y 5 a nivel regional (Euskaltel, R, Telecable, Guuk y Embou).
Su 41,8% de cuota de mercado en banda ancha deja a Movistar en un segundo puesto con el 33,5%, cifra que le valía para liderar sin problemas hasta ahora pero que con esta fusión va a tener que ponerse las pilas, y mucho, si quiere volver a posicionarse en el primer lugar. En tercer puesto se sitúa ahora Vodafone con un 16,7% de cuota de mercado, y Digi se queda en el cuarto con un 7,2%.
En lo que a líneas móviles se refiere, la nueva Masorange lidera también con un 42,8%, nuevamente por delante de una Movistar que tiene el 27%, seguidas de Vodafone con el 22% y Digi un 7,5%. Este nuevo dominio puede suponer menor competencia, ya que para empezar hay un rival menos al fusionarse dos, pero también se convierte uno en el más fuerte y claro dominador, al menos de momento. Habrá que ver si Movistar y las demás se quedan de brazos cruzados viendo cómo se llevan una parte de su pastel o si contraatacan con alguna estrategia brutal para llevarse clientes.